A Marichuy, vocera del CIG
A l@s concejalas y concejales del CIG
A los pueblos, naciones y tribus originarias de nuestro país
A las compañeras y compañeros del Congreso Nacional Indígena
A los familiares de la compañera Eloísa Vega
A las redes de apoyo al CIG de México y del mundo
Ante los recientes acontecimientos, manifestamos nuestro dolor y rabia por la pérdida de la compañera Eloísa, quien, como muchos de nosotr@s en las diversas geografías de México y el mundo, hizo suya la digna voz de los pueblos originarios y acompañó el caminar de l@s compañer@s del CIG en su largo andar por el territorio herido y accidentado de nuestro país. Enviamos a la familia de nuestra compañera un abrazo fraterno y colectivo de quienes en este rincón de México nos hemos organizado en torno a la iniciativa del CIG. Con nuestra solidaridad y honesto cariño, reiteramos nuestro apoyo a esta lucha que nos ha hecho mirarnos en el dolor de miles de mujeres, hombres, otroas, ancian@s y niñ@s que, como nosotr@s, son víctimas de la tormenta capitalista que amenaza con destruir nuestras formas de vida.
Estamos más que nunca convencid@s de que la organización abajo y a la izquierda es el único camino posible para reconstituir nuestros pueblos, defender nuestra tierra y resistir en nuestras luchas cotidianas contra la violencia estructural, que se empeña en aislarnos e irnos matando poco a poco. Les hacemos saber a nuestr@s compañer@s del CIG y de las redes de apoyo que estaremos hasta el último minuto recolectando firmas en respaldo a Marichuy y a la iniciativa a la que decidimos sumarnos. Agradecemos la fortaleza colectiva que nos han transmitido compas en todo el territorio y en el extranjero, porque junto con ustedes vamos aprendiendo a organizar nuestras luchas, a defender colectivamente lo que somos, lo que queremos ser.
En estos meses, hemos atestiguado cómo la guerra está cercando nuestros espacios cotidianos y nos obliga a vivir con miedo; a temer por la vida de nuestr@s amig@s, compañer@s y familiares; a vivir al día por la precarización de nuestros empleos y la falta de oportunidades para estudiar y trabajar; a sentirnos cada vez más ajenos en nuestros propios territorios, de donde nos han ido expulsando de manera invisible. Por eso es que nos sentimos parte de esta iniciativa del CIG que rebasa los límites temporales impuestos por el arriba clasista, machista, racista, que no entiende ningún otro tiempo que no se ajuste a sus intereses vanos y mezquinos. “Falta lo que falta” y les decimos a l@s compas del CNI que agradecemos sus enseñanzas y su terca resistencia, de la cual aprendemos y compartimos.
A Marichuy, voz colectiva del CIG, le enviamos nuestro cariño y fortaleza para que su salud se restablezca y pueda continuar con este largo caminar que seguiremos acompañando con nuestras humildes fuerzas y recursos; sabemos que después del 19 de febrero la organización que hemos comenzado a tejer continuará creciendo en todos los sentidos. Ante la descomposición de la clase política y de las instituciones de arriba, cabezas de la hidra capitalista, sólo la organización de nuestras comunidades será ejemplo de lucha y resistencia no sólo para la sobrevivencia inmediata, sino para la construcción de un mundo futuro anticapitalista y antipatriarcal.
Desde Zacatecas, Zac. A 18 de Febrero del 2018.
Colectiv@s e individu@s constituidos en la Red de apoyo al CIG en Zacatecas